Decoración con verde menta: el color más refrescante

Vivo, fresco y juvenil, el color verde menta lleva varias temporadas presente en proyectos de interior y accesorios decorativos.

Este color admite muchas combinaciones y se puede aplicar en diferentes habitaciones de la casa, como el dormitorio, el despacho, el baño e incluso la cocina. Es un color suave, pero a diferencia de otros tonos pastel no resulta demasiado femenino ni infantil.

El verde menta puede ser relajante y tranquilo, o vibrante y animado según el grado de saturación. Es un color frío, por eso combina mucho mejor con tonos cálidos (coral, naranja, malva…) o neutros (gris o blanco).

En cambio, si lo mezclas con otros colores fríos el menta no destacará.

Cómo combinar el color verde menta

Fotografía de Decoora
Fotografía de Decoora

La mezcla con el blanco es la primera opción si lo que buscas es utilizar este color sin cambiar demasiado el aspecto actual de una habitación.

Resulta ideal para el dormitorio o para el baño, y el efecto es relajante y calmado. Si no quieres arriesgarte, mantén las paredes en blanco y reserva el menta para los textiles, sillas, lámparas y complementos.

Si estás buscando un aire retro y campestre, prueba a pintar un mueble de madera en este color y lija después la pintura en los bordes y esquinas para simular el paso del tiempo.

Visto en Pitisandlilus
Visto en Pitisandlilus

Para lograr un efecto dramático, el negro es el mejor compañero del verde menta. Según los accesorios y materiales podemos lograr un espacio industrial o un espacio masculino.

En combinación con tonos dorados, cobrizos o bronces, el verde menta adquiere un aire lujoso. Y en su versión más intensa el mint quedará genial en una habitación infantil o juvenil.

¿Te gusta el color mint? ¿Cuál es tu combinación favorita?

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