En otoño las hojas caen y la luz del sol se apaga antes, pero sigue siendo una época del año preciosa. Los colores naranja, ocre y marrones con los que nos sorprende la naturaleza parecen ser infinitos.
Trasladar a tu casa el ambiente otoñal del bosque es muy fácil. Centros de mesa, guirnaldas y accesorios consiguen dar a tu hogar un ambiente distinto y cálido.
Salones que invitan al relax
Ahora que las temperaturas empiezan a bajar, es buen momento para dar un repaso a los textiles. Un sencillo cambio en las fundas de los cojines y una manta suave y mullida darán un aire diferente a tu salón. Las telas más pesadas y con textura van genial en este momento del año: lana, terciopelo, patchwork, estampados…
Durante el otoño los colores se inspiran en los árboles y sus hojas caídas. Todos los tonos desde el amarillo hasta el marrón irán perfectos para una decoración otoñal. Para romper, escoge un vibrante naranja o un rojo oscuro en los detalles.
Proyectos DIY de otoño
El otoño y sus tardes de lluvia son perfectos para hacer manualidades y cambiar el aspecto de tu casa.
No hace falta moverse lejos para encontrar todo lo que necesitas. Un paseo por el bosque o el parque bastan para hacerse con un montón de ramitas, hojas secas y piñas, que puedes combinar con velas, frutos secos o incluso palos de canela. Colócalos en un plato o vasija de cristal y obtendrás un precioso centro de mesa.
Las guirnaldas de hojas secas también son muy fáciles de hacer, y tienen un bonito efecto en las paredes.
Cuelga las hojas de un trozo de cuerda o de lana y colócalo en el lugar que prefieras: sobre el sofá, en una ventana, en la entrada o en el cuarto de los niños.
¿No es una idea preciosa y facilísima de hacer?